lunes, 13 de abril de 2015

Vig-Bay III (aventuras)

Seguimos estando a sábado, día antes de la carrera. Comimos en un sitio frente a la playa de Samil, y bastante bien por 10€ aunque quizá podría llegar a ser escaso para gente de buen comer. Fuimos a por los dorsales sin incidencias, lo tenían todo bien organizado. Luego nos dirigimos a Baiona para dejar el coche allí, porque volver en el autobús de la organización después de la carrera nos parecía un poco incómodo teniendo en cuenta que habría que esperar y esperar. Volvimos a vigo en el interurbano de Baiona a Vigo...5 euracos señores! Y luego se extrañan de que no usemos el transporte público. Podíamos haber cogido un Taxi como habíamos hablado. Pero no. Llegamos a vigo y como eran las 10 de la noche más que pasadas buscamos un sitio para cenar de camino al hotel. Os voy a dar un consejo, cuando vayáis fuera para correr una media o una maraton o lo que sea, lo mejor es coger un apartahotel o un bungalow donde podáis cocinar lo que queráis porque a mi lo que me gusta cenar el día antes es, arroz blanco y una tortilla o algo parecido y eso no lo suelen servir en ningún sitio. Y finalmente dimos con una casa de comidas y tapas, la señora estaba cerrando pero nos vio cara de tontos y dijo "estos me van a dar a mi de comer".

-Sí pasad que algo habrá!...

Un tugurio, de esos que al final piensas "bueno pero seguro que nos cobra dos duros y la comida está como la de mamá". Pues un cojón y medio. Según nos puso los platos ya tuvimos que pasarles la servilleta, estaban grasientos. Las lentejas que me pedí yo...dejaban muchísimo que desear, les doy yo mil vueltas y sin echarles chorizo. Es que no llevaban ni sofrito.  Una ensalada (lechuga y tomate) avinagrada, jamón asado con salsa de tomate caliente sin más (estaba sequísimo), y unos chipirones que estaban sin lavar porque vamos mi madre los lava les quita la uña esa de dentro y les da la vuelta para que queden blanquitos. Estos estaban tal cual de la pescadería y confitados en aceite. Ni los probé. Éramos 4 y nos cobró 39€ recuerdo hasta lo que nos cobró por cada cosa. 2€ la botella de agua, 4€ las lentejas, 5€ la ensalada, 12€ el jamón (6 lonchas finas), 16€ los chipirones (8 chipirones o menos ni los conté).

Esa noche me acosté con unas ganas de correr al días siguiente que no os podéis imaginar. Vamos que prefería ir a tirarme por el acantilado. Al día siguiente me levanté con las mismas ganas pero no me lo pensé, bajamos a desayunar, al menos había yogures y cereales tipo kelogs de toda la vida, un té y un par de tostadas. Un ibuprofeno para que no me dieran guerra los ovarios, y el hierro, eso lo tuve que traer yo de casa claro. Volví a la habitación a poner el traje de faena y me quedé mirando al mar pensando "donde me he metido!". Pues aún no lo sabía todo...

Fuimos trotando a la salida, llegamos casi casi en punto con lo cual no tuve tiempo para ponerme nerviosa y que me volvieran a entrar ganas de mear. Perfecto! No había cajones de salida pero me puse un poco para atrás para no morir arrollada, aunque luego me dijeron que ningún problema delante, nadie se puso agresivo ni a empujar, la verdad que es una avenida ancha y se iba de lujo. Sonó el disparo, me puse los cascos y le di al play, hola "Thunderstruck"! Me asusté con una niña, chica, mujer que tenía delante, no sabía qué era porque esa delgadez es completamente anormal en una persona adulta, luego me he enterado de que estaba en la categoría promesas y llegó segunda de esa categoría con 1h56 o así...Os juro que yo pensaba que era una niña que correría unos 3 km y se saldría, no sabía si llevaba dorsal puesto que yo iba detrás.  Luego me encontré con el señor de 67años con el que crucé la meta de la carrera de mi pueblo hace unos meses. Lo dejé atrás y seguí a mi ritmillo cómodo, juro que me sentía como cuando voy calentando, no quise forzar la máquina puesto que hasta hace nada no daba pie con bola por culpa de esa anemia de mierda. La música ayudaba mucho y acerté de lleno con la banda sonora de la isla:

Eso sonando justo al llegar arriba del monte Lourido cuando se abre la vista hacia el mar...se me pusieron los pelos como escarpias. ¡Qué emoción! Una pasada la verdad. Mucha gente prefiere no llevar música, dicen que prefieren oír los ánimos de la gente y también oír los pasos y la respiración. Personalmente prefiero sentir mis pasos y mi respiración y no oír el "desacompasamiento" que llevan otros y su sufrimiento. Fui viendo pasar los kilómetros como quien ve pasar barcos sentado en un banco, iba alucinando viendo cómo muchos se quedaban atrás tirados blancos y temblando, otros inconscientes directamente, no sé si es mala suerte o inconsciencia, muchos serán los que no entrenan y se meten en carreras de éste tipo seguro, luego están los que salen a toda leche y acaban pinchando a 3km de la meta...yo como decidí disfrutar de la música y del recorrido directamente ni miré el reloj. Eso sí me arrepentí un poco al llegar a meta y ver el reloj en 2:00:55...podía haber bajado de dos horas tranquilamente. Pero vamos bien contenta del resultado inesperado pensaba tardar como 15minutos más.

Es lo que le recomiendo a todo el mundo, no somos profesionales, no vivimos de esto...no merece la pena echar el hígado por intentar hacer una marca, mejor disfrutar, total si uno ha entrenado y está en buena forma siempre se acaba superando sin esforzarse. Yo lo tengo claro, el año que viene seguro que mejoro la marca y yendo igual de cómoda jajaja!

Si alguien se plantea hacer una media maratón y tiene posibilidad de hacer esta la recomiendo 100% eso sí, lo mejor es coger un bungalow en algún camping que esté abierto o coger un hotel con muy buena crítica o...si puede gorronear a familiar o amigo que viva en la zona aún mejor jajaja!

2 comentarios:

  1. Increíble! Yo no corro más de un par de km sin morirme... XD

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  2. Yo no corría más de 100m sin echar el hígado...la primera vez que intenté correr salí a trotar 7min y acabé con agujetas para una semana.

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